En cuanto al desarrollo y duración de las intervenciones, el Dr. Diamantopoulos explica que la utilización de esta tecnología prolonga el tiempo quirúrgico en unos 30-40 minutos en comparación con la misma cirugía realizada sin RMNi; un tiempo que, a su juicio, compensa muchísimo, dados los beneficios para el paciente: "permite un mayor grado de resección de los tumores, reduce el porcentaje de reintervenciones necesarias, así como la estancia hospitalaria al requerir menos controles de imagen postoperatorios, y se minimizan los riesgos porque la resonancia intraoperatoria nos dice, evitando las consecuencias del desplazamiento de la masa cerebral, cómo estamos resecando el tumor, especialmente en las zonas 'elocuentes' del cerebro, que son las más sensibles y sobre las que es más importante tener un mayor control".
"El éxito de esta herramienta no es otro que la seguridad que nos da a los cirujanos y, sobre todo, a los pacientes", asevera, recordando que el seguimiento prescrito para estos pacientes es igualmente sencillo. Son dados de alta con una resonancia de control postoperatoria que se realiza en el propio quirófano; después deben acudir a una revisión a los 15 días y posteriormente a controles cada dos meses.
De cara al nuevo curso, el jefe del Servicio de Neurocirugía de HM Hospitales indica que con mantener el crecimiento exponencial registrado en estos meses se cumplirían sus objetivos, a los que hay que sumar la próxima incorporación, una vez comience a funcionar el sexto centro del grupo, HM Universitario Puerta del Sur (HMPS) -que se está construyendo en Móstoles y se abrirá a finales de 2014-, de la neurocirugía funcional o del comportamiento a la cartera de servicios de la RMNi.