Superar las primeras 72 horas es crítico para las personas diagnosticadas con un ictus pues es el periodo de mayor riesgo de muerte o de empeoramiento clínico. A partir de ese momento, el paciente suele ser trasladado a una habitación de hospitalización individual donde continúa el tratamiento e inicia la rehabilitación.
El ictus está considerado la primera causa de discapacidad en Europa y una de las primeras causas de muerte. En España, según datos del Ministerio de Sanidad, afecta a unas 120.000 personas cada año de las que casi un 21% acaban falleciendo, pero se calcula que el 90% de los casos son evitables si se siguen hábitos saludables de vida. Los accidentes cerebrovasculares suelen aparecer a partir de los 65 años, aunque se ha detectado un incremento del 25% en el número de casos en las personas de entre 20 y 64 años.
A la hora de conseguir una mayor supervivencia es fundamental que el paciente sea atendido durante las seis horas posteriores a presentarse los primeros síntomas, aunque lo ideal sería no dejar pasar más de dos horas. En este sentido, el Código Ictus que se aplica en HM Nou Delfos se sustenta en un protocolo en red, multidisciplinar y coordinado que garantiza el acceso a las terapias necesarias para restaurar la reperfusión cerebral mediante la eliminación del trombo y la consiguiente reapertura de la arteria obstruida. HM Nou Delfos, como referencia en la sanidad privada catalana, garantiza el acceso de las personas afectadas independientemente de dónde se encuentren y de cuál sea su vía de acceso al sistema de salud.
La Dra. Beatriz Chavarría, neuróloga y coordinadora del Código Ictus de HM Nou Delfos, explica que “disponemos de un circuito de actuación ajustado a nuestro personal e instalaciones para optimizar el tratamiento y, sobretodo, reducir el tiempo de asistencia. Lo primero que hacemos es estabilizar al paciente y confirmar el diagnóstico. Para ello, a los pocos minutos de su llegada, se le somete a un TC y, en caso de confirmación del ictus, los especialistas disponen de un TC multimodal durante las 24h. Esta tecnología es una de las más eficaces actualmente para determinar el tratamiento, ya que permite conocer la situación vasculocerebral del paciente. Mediante el primero, que no requiere contraste, puede descartarse el origen hemorrágico o una lesión simuladora de ictus, así como valorar la existencia de signos precoces que delaten el origen de la sintomatología clínica”.
Un 73% de ictus isquémico
La aplicación del Código Ictus ha favorecido la detección de un mayor número de casos. Según se desprende del informe de actividad del Hospital HM Nou Delfos, entre el 1 de marzo de 2024 y el 30 de mayo de 2025, se han atendido 118 casos, lo que supone un incremento del 22% respecto al año pasado. El diagnóstico rápido y preciso y la inmediata actuación son determinantes para conseguir un mayor índice de supervivencia como lo corrobora el hecho de que se logra en el 99% de los casos durante las primeras 72h. de ingreso.
El 73% de los pacientes que acceden al Código Ictus de HM Nou Delfos presentan un accidente cerebrovascular de tipo isquémico. Esta modalidad está provocada por la obstrucción aguda de una arteria cerebral que conlleva una limitación a la oxigenación cerebral en su área de influencia.
Otro dato significativo de este informe es que el 56% de las personas tratadas en el Código Ictus son mujeres, la mediana de edad de los pacientes es de 75 años y la hipertensión arterial y el tabaquismo aparecen como principales factores de riesgo del accidente cerebrovascular. En este sentido, la Dra. Chavarría afirma que “no solo es una tendencia establecida en la literatura médica, sino también un desafío persistente en el ámbito de la prevención. La HTA, en particular, sigue siendo la causa modificable más prevalente, contribuyendo de forma silenciosa y sostenida al daño vascular que precede al ictus. Por su parte, el tabaquismo, además de ser un factor de riesgo independiente y completamente evitable, actúa de manera sinérgica con otros elementos, acelerando el deterioro de la salud cerebrovascular”.
Asimismo, la Dra. Chavarría hace incidencia en que “deben reforzarse las estrategias de sensibilización, cribado y control de estos factores en los niveles asistenciales previos y posteriores al ictus, trabajando de forma coordinada con el resto de profesionales y promoviendo hábitos saludables. Reducir la incidencia del ictus no solo es posible, sino prioritario, si actuamos decididamente sobre estos dos pilares del riesgo vascular”.
El director médico de HM Nou Delfos, Dr. Julio García Prieto, se muestra satisfecho de los resultados que se están obteniendo y sitúa la clave en “la buena coordinación de los diferentes servicios médicos, la existencia de un neurólogo de guardia, una TC multimodal disponible las 24h. para poder realizar en todo momento trombectomías si así se requiriera”.
Por su parte, la directora territorial de HM Hospitales en Cataluña, Dra. Lidón Milla, señala que “HM Nou Delfos es, actualmente, una referencia en la detección y abordaje del ictus en la sanidad privada catalana y todo es fruto de la excelente labor de coordinación que se está llevando a cabo entre los diferentes especialistas que, apoyados por un avanzado equipamiento tecnológico, pueden ofrecer una atención de máxima calidad en poco tiempo, en pocos minutos en la mayoría de los casos. Este hecho es clave para conseguir superar un episodio agudo. Posteriormente, asesoran al paciente sobre los hábitos de vida que deben seguir para prevenir una recaída o repetición”.
Barcelona, 16 de julio de 2025