¿Sufres de dolores de cabeza frecuentes y no sabes si se trata de migraña o cefalea? Aunque muchas veces usamos estos términos como si fueran lo mismo, existen diferencias importantes que pueden ayudarte a identificar tus síntomas y encontrar el tratamiento adecuado.
En este artículo te explicamos cómo distinguir entre migraña y cefalea para que cuides mejor tu salud y bienestar.
¿Qué es una cefalea?
La cefalea, comúnmente conocida como dolor de cabeza, es un término genérico que engloba una amplia gama de dolores y molestias en la cabeza. Puede manifestarse como una leve presión o un dolor incapacitante. Las causas subyacentes de la cefalea son diversas y pueden abarcar desde factores cotidianos como el estrés y la tensión muscular hasta problemas de salud más complejos, como infecciones o trastornos de la visión.
La intensidad, la duración y la localización del dolor pueden variar considerablemente según el tipo de cefalea. Algunas son leves y transitorias, desapareciendo rápidamente con reposo o analgésicos, mientras que otras pueden ser persistentes e interferir significativamente con las actividades diarias. Comprender qué es la cefalea, sus diferentes tipos y sus síntomas asociados es fundamental para un diagnóstico preciso y un tratamiento eficaz.
Dentro del amplio espectro de las cefaleas, la cefalea tensional es la más frecuente. Esta se caracteriza por:
- Dolor sordo y opresivo, como una banda que aprieta la cabeza.
- Dolor bilateral, afectando ambos lados de la cabeza.
- Sensibilidad en el cuero cabelludo, cuello y hombros.
A diferencia de la migraña, la cefalea tensional generalmente no suele provocar náuseas, vómitos o sensibilidad a la luz y al sonido. Aunque es molesta, rara vez es incapacitante y suele responder bien a analgésicos de venta libre y medidas de relajación.
¿Qué es la migraña?
La migraña, por otro lado, es un tipo específico de cefalea, mucho más compleja que un simple dolor de cabeza. Se distingue por:
- Dolor pulsátil e intenso, generalmente en un lado de la cabeza (aunque puede ser bilateral).
- La duración puede variar de 4 a 72 horas. Durante este tiempo, la persona afectada puede verse obligada a suspender sus actividades cotidianas debido a la intensidad del dolor y los síntomas asociados.
- Síntomas comunes: náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz (fotofobia) y al sonido (fonofobia).
- En algunos casos, la migraña puede ir precedida o acompañada de un aura, un conjunto de síntomas neurológicos que suelen manifestarse como alteraciones visuales, como destellos de luz, puntos ciegos o visión borrosa.
En general, la migraña puede ser debilitante y suele requerir un tratamiento más específico, como medicamentos recetados o cambios en el estilo de vida.
Diferencias clave entre una migraña y una cefalea
Identificar si el dolor que experimentas es una migraña o una cefalea tensional es clave para recibir el tratamiento adecuado. A continuación, te mostramos las principales diferencias:
- Tipo de dolor: mientras que la cefalea tensional se caracteriza por un dolor sordo y opresivo, la migraña se manifiesta como un dolor pulsátil e intenso.
- Ubicación: la migraña suele afectar un solo lado de la cabeza, mientras que la cefalea tensional es bilateral.
- Síntomas acompañantes: la migraña puede incluir náuseas, vómitos, fotofobia y fonofobia. La cefalea tensional generalmente no presenta estos síntomas.
- Duración: la migraña dura entre 4 y 72 horas, mientras que la cefalea tensional puede durar desde 30 minutos hasta varios días.

Consejos para identificar y tratar migrañas o cefaleas
Identificar correctamente si sufres de migraña o cefalea es el primer paso para obtener el alivio que necesitas. Si experimentas dolores de cabeza recurrentes, presta atención a:
- La intensidad y el tipo de dolor.
- La presencia de otros síntomas, como náuseas o sensibilidad a la luz.
- La duración del episodio.
Recuerda que la autodiagnosis no sustituye la evaluación de un profesional, por lo que siempre es fundamental consultar a un especialista para un diagnóstico preciso.
Factores que ayudan a diferenciar la migraña y la cefalea
- Naturaleza del dolor: ¿es un dolor pulsátil y palpitante o una presión constante y opresiva? El dolor pulsátil es más característico de la migraña, mientras que la presión opresiva suele indicar cefalea tensional.
- Intensidad: ¿el dolor es leve, moderado o severo? Las migrañas suelen ser más intensas, llegando a ser incapacitantes. Las cefaleas tensionales, en cambio, suelen ser leves o moderadas.
- Localización: ¿el dolor afecta a un lado de la cabeza o a ambos? La migraña a menudo es unilateral, mientras que la cefalea tensional suele ser bilateral.
- Síntomas asociados: ¿experimentas náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz y al sonido? Estos síntomas son comunes en la migraña, pero no en la cefalea tensional.
- Aura: ¿experimentas alteraciones visuales, como destellos de luz o puntos ciegos, antes o durante el dolor de cabeza? El aura es un síntoma característico de la migraña.
- Duración: ¿cuánto tiempo dura el dolor de cabeza? Las migrañas pueden durar de 4 a 72 horas, mientras que las cefaleas tensionales pueden durar desde 30 minutos hasta varios días.
- Factores desencadenantes: ¿identificas algún factor que desencadene tus dolores de cabeza, como el estrés, la falta de sueño, ciertos alimentos o bebidas? Llevar un diario de dolores de cabeza puede ayudarte a identificar tus desencadenantes específicos.

Consejos para prevenir las migrañas y cefaleas tensionales
Aunque no hay una solución mágica para eliminar completamente los dolores de cabeza, algunos cambios en tu estilo de vida pueden marcar la diferencia. Prueba estos consejos sencillos para reducir la frecuencia e intensidad de tus cefaleas y migrañas:
- Controla el estrés: este es un desencadenante común. Practica técnicas de relajación como la meditación, yoga o respiración profunda.
- Duerme bien: la falta de sueño puede provocar dolores de cabeza. Intenta dormir de 7 a 8 horas cada noche y mantén un horario regular.
- Hidrátate: bebe suficiente agua a lo largo del día. La deshidratación puede causar dolor de cabeza.
- Lleva una dieta equilibrada: presta atención a los alimentos que consumes y evita aquellos que puedan desencadenar migrañas, como el chocolate, los quesos añejos o los alimentos procesados.
- Practica ejercicio de forma regular: la actividad física puede ayudar a prevenir dolores de cabeza. Encuentra una actividad que disfrutes y practícala con regularidad.
- Cuida tu postura: mantén una buena postura, especialmente al trabajar. Un mal posicionamiento puede causar tensión y dolor de cabeza.
- Modera el consumo de cafeína y alcohol: un consumo excesivo de estas sustancias puede desencadenar dolores de cabeza.
- Identifica tus desencadenantes: presta atención a qué situaciones o factores te provocan dolor de cabeza (luces brillantes, olores fuertes, etc.) para evitarlos.
- Lleva un registro de tus dolores de cabeza cuando su médico se lo solicite: anota cuándo ocurren, su intensidad y duración para identificar patrones y ayudar a tu médico a personalizar el tratamiento.
- Consulta a un especialista: si los dolores de cabeza son frecuentes o intensos, consulta a un especialista para un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Cuida tu salud con HM Hospitales
Distinguir entre migraña y cefalea tensional es el primer paso para encontrar el alivio adecuado. En HM Hospitales, nuestros neurólogos y expertos en unidad de dolor, pueden ayudarte a comprender las causas de tu dolor de cabeza y diseñar un plan de tratamiento personalizado. No dudes en contactarnos para obtener la atención que necesitas.
Si los dolores de cabeza son persistentes o severos, no los ignores. Agenda una consulta con uno de nuestros especialistas y empieza a mejorar tu calidad de vida hoy mismo.
Recuerda, este artículo tiene un fin divulgativo y no sustituye la consulta médica. Ante cualquier duda, consulta con un profesional de la salud.
