La tendinitis aquílea es una lesión común que afecta al tendón más grande del cuerpo humano: el tendón de Aquiles.
Si practicas deporte con regularidad y has notado molestias en la parte posterior del talón, es importante que sepas identificar los síntomas de esta lesión y conozcas las opciones de tratamiento disponibles. En este artículo, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la tendinitis aquílea, desde sus causas hasta su recuperación.
¿Qué es la tendinitis aquílea?
La tendinitis aquílea es una inflamación del tendón de Aquiles, que conecta los músculos de la pantorrilla con el hueso del talón. Esta patología suele desarrollarse gradualmente y afecta tanto a deportistas, por sobreúso, como a personas sedentarias, por utilización de calzado plano.
Esta lesión es cada vez más frecuente en nuestra sociedad. Se estima que afecta a un 10% de los corredores habituales, y su incidencia aumenta significativamente con la edad, especialmente a partir de los 30 años. La sobrecarga mecánica, combinada con factores como el sedentarismo creciente y los cambios bruscos en la actividad física, ha convertido esta lesión en un motivo de consulta cada vez más común en las unidades de traumatología.
Mecanismo de lesión y anatomía
El tendón de Aquiles es una estructura fundamental para la marcha y el movimiento. Actúa como un potente resorte elevando el talón durante la marcha, la carrera y el salto. Cuando este tendón se somete a tensiones excesivas o repetitivas, pueden aparecer pequeñas lesiones que, si no se tratan adecuadamente, evolucionan hacia una inflamación crónica.
Síntomas de la tendinitis aquílea
Los síntomas suelen desarrollarse de forma progresiva. Algunos síntomas iniciales pueden ser:
- Dolor leve después del ejercicio.
- Rigidez matutina en el talón.
- Molestia al subir escaleras.
- Sensibilidad en la zona del tendón.
A medida que la lesión progresa, pueden aparecer síntomas más severos como dolor intenso durante la actividad física, inflamación visible y debilidad en el tobillo. Es especialmente característico el dolor al dar los primeros pasos por la mañana, que suele mejorar con el movimiento, pero empeora con la actividad prolongada.
Causas y factores de riesgo
La tendinitis aquílea puede aparecer por diversas razones. Entre ellas destacan:
- La sobrecarga mecánica: especialmente cuando se realizan cambios bruscos en la intensidad o duración del ejercicio. El pie plano o cavo, también pueden contribuir al desarrollo de esta lesión.
- La edad: juega un papel importante, ya que la capacidad de recuperación del tendón disminuye con los años.
- El uso de fármacos: el uso de determinados antibióticos como las fluoroquinolonas o el empleo de hipolipemiantes como las estatinas, también se han relacionado con un mayor riesgo de desarrollar tendinitis aquílea.
- Deformidades del calcáneo: en calcáneo es el hueso del talón. La deformidad puntiaguda de su parte posterosuperior produce un roce con el tendón y la inflamación del mismo.
La importancia del diagnóstico profesional
El diagnóstico de la tendinitis aquílea requiere una evaluación médica completa. El especialista realizará una exploración física detallada, evaluando la localización del dolor, de la inflamación y la funcionalidad del tobillo. Es importante analizar la biomecánica del pie y la marcha, ya que pueden existir factores predisponentes que necesiten corrección.
Las pruebas de imagen, como la radiografía, la ecografía o la resonancia magnética, son necesarias para confirmar el diagnóstico y determinar la extensión y localización de la lesión.
Tratamiento integral

El tratamiento de la tendinitis aquílea debe ser personalizado y prolongado. En la fase inicial, es fundamental controlar la inflamación mediante:
- reposo relativo.
- aplicación de hielo.
- uso de taloneras específicas, que ayudan a reducir la tensión sobre el tendón durante la recuperación.
La fisioterapia es un componente crucial del tratamiento. Los programas actuales se basan en ejercicios excéntricos progresivos, que han demostrado excelentes resultados en estudios científicos. Estos ejercicios deben realizarse de forma controlada y supervisada por profesionales.
Las terapias biológicas, PRP (plasma rico en plaquetas) han demostrado su utilidad y han de tenerse en cuenta como herramienta terapéutica.
Prevención y cuidados continuados
La prevención de la tendinitis aquílea se basa en mantener una buena higiene postural y mecánica del movimiento. Es fundamental realizar un calentamiento y estiramiento adecuado antes del ejercicio y aumentar gradualmente la intensidad de la actividad física. El uso de calzado apropiado y la atención a las señales de sobrecarga son igualmente importantes.
Impacto en la vida diaria y el deporte
La tendinitis aquílea puede afectar significativamente a la calidad de vida, especialmente en deportistas. Los estudios muestran que la recuperación completa puede llevar entre 3 y 6 meses, dependiendo de la gravedad de la lesión y el compromiso con el tratamiento. Durante este período, es importante adaptar las actividades diarias y deportivas para permitir una correcta recuperación.
Vuelta a la actividad deportiva

El retorno al deporte debe ser gradual. Los programas de readaptación deben ser personalizados y controlados por un rehabilitador-fisioterapeuta.
Atención especializada en HM Hospitales
En nuestra Unidad de Traumatología y Medicina Deportiva ofrecemos un abordaje integral de la tendinitis aquílea. Nuestro equipo multidisciplinar trabaja de forma coordinada para proporcionar:
- Diagnóstico preciso mediante técnicas avanzadas.
- Plan de tratamiento personalizado.
- Rehabilitación específica y supervisada.
- Seguimiento continuo de la evolución.
La experiencia de nuestros especialistas, combinada con las últimas tecnologías en diagnóstico y tratamiento, nos permite ofrecer los mejores resultados en la recuperación de esta lesión.
Cuida tu salud con HM Hospitales
La tendinitis aquílea, aunque puede ser una lesión frustrante, tiene buen pronóstico cuando se aborda de manera adecuada y temprana. La clave está en combinar un tratamiento profesional con el compromiso del paciente en su recuperación.
En HM Hospitales, entendemos el impacto que esta lesión puede tener en tu vida diaria y deportiva. Por eso, nuestro equipo está preparado para ofrecerte un tratamiento integral y personalizado que te ayude a recuperar tu nivel de actividad de forma segura y efectiva.
Recuerda, este artículo tiene un fin divulgativo y no sustituye la consulta médica. Ante cualquier duda, consulta con un profesional de la salud.
