Una operación de mandíbula, también conocida como cirugía ortognática o cirugía maxilofacial, es un procedimiento quirúrgico que busca corregir problemas en la alineación de la mandíbula y el maxilar.
Esta cirugía no solo mejora la estética facial, proporcionando una sonrisa más armónica y un perfil más equilibrado, sino que también puede solucionar problemas funcionales que afectan a la calidad de vida, como la dificultad para masticar, hablar, respirar o incluso dormir.
Si te has sometido o te vas a someter a una operación de mandíbula, es completamente natural que te preguntes cómo será la recuperación. En este artículo, te explicamos qué esperar después de la cirugía y te damos consejos para que tu recuperación sea lo más rápida y cómoda.
Motivos para considerar una operación maxilofacial
Antes de profundizar en la recuperación, es importante comprender qué implica la cirugía ortognática. Este procedimiento consiste en realizar cortes en los huesos de la mandíbula y/o el maxilar para reposicionarlos de forma que mejoren su alineación. La intervención se realiza a través de la boca, lo que evita cicatrices visibles en la piel.
La necesidad de una operación de mandíbula puede deberse a diferentes motivos:
- Problemas de mordida (maloclusión): cuando los dientes superiores e inferiores no encajan correctamente, generando dificultad para masticar, hablar o para una correcta higiene bucal.
- Desproporción facial: cuando existe un desequilibrio en el tamaño o la posición de la mandíbula o el maxilar, lo que puede afectar a la armonía facial y tener un impacto en la autoestima.
- Problemas respiratorios: en algunos casos, la desalineación de la mandíbula puede obstruir las vías respiratorias, provocando apnea del sueño, ronquidos o dificultad para respirar por la nariz.
- Dolor y disfunción de la articulación temporomandibular (ATM): la cirugía ortognática puede aliviar el dolor y mejorar la función de la ATM en casos de problemas articulares relacionados con la maloclusión.
¿Cómo es la recuperación habitual de una cirugía maxilofacial?

La recuperación tras una operación de mandíbula es un proceso gradual que varía en función de cada paciente y del tipo de cirugía realizada. Factores como la complejidad del procedimiento, la edad, el estado de salud general, la capacidad de cicatrización individual y el seguimiento de las recomendaciones médicas influyen en el tiempo y la forma en que te recuperarás.
Aunque cada persona vive el postoperatorio de manera única, en general, la mayoría de los pacientes pueden esperar una recuperación que sigue estas fases:
- Hospitalización: tras la cirugía, permanecerás ingresado en el hospital entre 1 y 3 días para controlar tu evolución, administrarte medicación intravenosa para controlar el dolor y la inflamación, y asegurarnos de que puedes alimentarte e hidratarte correctamente.
- Inflamación y hematomas: es normal sentir la cara inflamada, especialmente en las mejillas, alrededor de los ojos y en la zona de la mandíbula, así como la aparición de hematomas. La inflamación suele alcanzar su punto máximo entre las 48-72 horas posteriores a la cirugía y disminuye gradualmente en las siguientes semanas.
- Dolor: es posible que sientas dolor en la mandíbula, la cara y la boca, que puede controlarse con analgésicos. Es fundamental tomar la medicación según las indicaciones pautadas por tu médico para evitar molestias innecesarias y garantizar tu bienestar durante el proceso de recuperación.
- Dieta blanda: durante las primeras semanas, deberás seguir una dieta blanda o líquida para evitar forzar la mandíbula y permitir que los huesos se consoliden correctamente. A medida que la inflamación disminuya y la mandíbula se vaya recuperando, podrás ir incorporando alimentos más sólidos de forma gradual.
- Higiene bucal: mantener una buena higiene bucal es crucial para prevenir infecciones y asegurar una correcta cicatrización. El cirujano te facilitará instrucciones específicas sobre cómo cepillarte los dientes, usar el hilo dental y enjuagarte la boca durante el postoperatorio.
- Limitación de la actividad física: deberás evitar actividades físicas intensas, levantar objetos pesados y los deportes de contacto durante al menos 6 semanas, o seguir cualquier otra indicación médica. El objetivo es prevenir movimientos bruscos o impactos que puedan afectar a la mandíbula.
Consejos para acelerar la recuperación tras una operación de mandíbula

Después de una cirugía maxilofacial, es fundamental seguir las indicaciones del cirujano para lograr una recuperación exitosa. Además, existen algunas recomendaciones adicionales que pueden ayudarte a acelerar el proceso y volver a tu rutina lo antes posible. Aquí te explicamos qué puedes hacer para sentirte mejor durante la recuperación tras una operación de mandíbula:
- Reposo: es normal sentir cansancio durante los primeros días tras la cirugía. Descansar adecuadamente permite a tu cuerpo centrarse en la recuperación y cicatrización. Procura dormir con la cabeza elevada para reducir la inflamación y favorecer el retorno venoso.
- Aplica frío en las zonas inflamadas: durante los primeros 2-3 días después de la operación, usa compresas frías sobre las zonas inflamadas. Esto ayudará a reducir la hinchazón, el dolor y la formación de hematomas. Recuerda seguir las indicaciones de tu médico sobre la duración y frecuencia de las aplicaciones.
- Mantente bien hidratado: beber mucha agua es clave para mantenerte hidratado, lo que favorece la cicatrización y ayuda a evitar la sequedad bucal. También facilita la digestión de los alimentos blandos, que serán parte de la dieta durante la recuperación.
- Sigue una alimentación adecuada: una dieta equilibrada y rica en proteínas, vitaminas y minerales es esencial para proporcionar a tu cuerpo los nutrientes que necesita para recuperarse y fortalecerse. Opta por alimentos blandos y fáciles de masticar, como purés, sopas y batidos.
- Sé paciente con tu recuperación: la recuperación tras una cirugía de mandíbula lleva su tiempo. No te desanimes si no ves resultados inmediatos, cada pequeño avance es un paso hacia tu objetivo final: una sonrisa sana, funcional y estética. Recuerda que la paciencia es parte del proceso.
- Comunicación: no dudes en contactar con tu cirujano o con el equipo médico si experimentas dolor intenso, sangrado excesivo, fiebre, inflamación continua, dificultad para respirar, problemas de cicatrización u otros síntomas inusuales.
Beneficios a largo plazo de una cirugía maxilofacial
La recuperación tras una operación de mandíbula requiere tiempo y paciencia, pero los beneficios a largo plazo hacen que el proceso valga la pena. Esta cirugía no solo mejora la estética facial, sino que también puede transformar tu vida de múltiples maneras. A continuación, te explicamos algunos de sus beneficios:
- Mejorar la masticación: corregir la alineación de la mandíbula y el maxilar facilita la masticación de los alimentos. Esto mejora la digestión y la absorción de nutrientes, contribuyendo así a una mejor salud general. Si has experimentado dificultades al comer, esta cirugía puede ser la solución que necesitas para disfrutar de tus comidas sin molestias.
- Facilitar el habla: una correcta alineación de los dientes y la mandíbula mejora la pronunciación, la claridad del habla y la comunicación, tanto a nivel personal como profesional.
- Mejorar la respiración: en algunos casos, la cirugía ortognática puede mejorar la respiración nasal al corregir problemas en la vía aérea superior. Esto se traduce en un sueño más reparador, menos ronquidos y una mayor oxigenación.
- Aliviar el dolor y la disfunción de la ATM: si sufres dolor o problemas en la articulación temporomandibular, la cirugía puede corregir los problemas de mordida que causan estas molestias. Mejorar la función ATM puede aliviar el dolor al abrir y cerrar la boca, así como facilitar la masticación y otras actividades cotidianas.
- Aumentar la autoestima: los beneficios de esta cirugía van más allá de lo funcional. La mejora estética facial y la resolución de los problemas funcionales pueden aumentar la confianza en uno mismo, mejorar la autoestima y facilitar las relaciones interpersonales. Sentirse bien con uno mismo, y disfrutar de una mejor calidad de vida son resultados que muchos pacientes experimentan tras la cirugía.
Tomar la decisión de someterse a una cirugía maxilofacial puede parecer complicado al principio, pero es importante recordar que este tipo de intervención tiene como objetivo mejorar significativamente tu calidad de vida. No solo estarás más cerca de la sonrisa que deseas, sino que también podrás experimentar mejoras notables en tu salud bucodental y en tu bienestar general.
Cuida tu salud con HM Hospitales
Si estás considerando una operación de mandíbula, contar con la información y el apoyo adecuados es fundamental. Busca profesionales con experiencia en cirugía ortognática que puedan resolver tus dudas y acompañarte en cada etapa del proceso.
En HM Hospitales, contamos con un equipo de cirujanos maxilofaciales altamente cualificados y con amplia experiencia en cirugía ortognática. Nos apasiona lo que hacemos y nos comprometemos a ofrecerte la mejor atención posible en cada etapa del proceso.
Recuerda, este artículo tiene un fin divulgativo y no sustituye la consulta médica. Ante cualquier duda, consulta con un profesional de la salud.
